Haciendo un esfuerzo de memoria y crítica histórica, podemos
descubrir la conexión entre la actitud ofensiva de los poderosos representados
por la TROIKA hacia el pueblo griego y las consecuencias a que puede conducir
dicha actitud.
Con esa mínima cultura histórica o bien una información
imparcial y objetiva descubriríamos como el nazismo que asoló Europa en los
años 30, no hace tanto, fue el fruto maldito de una situación de crisis que
asfixiaba al pueblo alemán tras ser sometido a unas condiciones ladinas de
endeudamiento por los vencedores de la I Guerra Mundial.
Ese nazismo fue elegido en las urnas alemanas tras las
crueles medidas de austeridad impuestas por Francia, Reino Unido y EE.UU. al
pueblo alemán y que le generaron una deuda inasumible. Fue Hitler quien se
opuso a esas políticas económicamente devastadoras e impuso otras de
recuperación económica, aunque con las consecuencias conocidas.
Una vez expuestos estos hechos y salvando las distancias, no
deja de inquietar las similitudes en los pasos históricos que condujeron a
Alemania al nazismo y en Grecia ha llevado a un partido neonazi a ser la
tercera fuerza política democráticamente elegida.
Las políticas de austeridad propuestas e impuestas por la
TROIKA a Grecia están causando el deterioro de su economía y el empobrecimiento
de su sociedad.
Estos son datos constatables y que el ministro de finanzas
griego, Yanis Varoufakis, ha expuesto en sus conversaciones con su homólogo
alemán. La reacción no ha sido, como cabria esperar, de comprensión hacia ese
sufrimiento sino de ignorancia histórica cuando no de imprudencia.
Pero está claro que el poder económico representado por la
TROIKA y respaldado por Merkel prefiere un avance del nazismo, al que creen
poder controlar, a un gobierno de izquierda “radical” como califican a SYRIZA y
que haría peligrar sus intereses económicos y financieros .
La pregunta final que me planteo es: ¿Se puede seguir
presionando a Grecia sin considerar una vía digna de negociación?
Purificacion Moreno